Iglesia de Pals

Iglesia de Pals

1977-2000

Apacible soledad, ideal donde vivir… y detrás, el mar bravío.
Paseo de reflexiones que la naturaleza llena con un color que dominas y sobre el que desarrollas  un  juego  de  sombras  y luces con preciso esmero.
Su espacio, silencioso aún, se llenará  de  algarabía.  Niños, tañido de campanas, un silbido suave de gorriones, una  brisa fresca.
Caminemos, apoyados en nuestros recuerdos, con el sosiego del momento.

Dra. Abad